"Zapatero , a tus zapatos"
Por Vera Marina Rexach
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Abstract:
El artículo aborda los siguientes conceptos : la relación de la informática con los contenidos escolares y su "status" dentro de los mismos, la función del docente respecto del uso de la informática como recurso didáctico y la formación de una base teórica para la aplicación de la informática a la educación.
Asimismo, intenta establecer un análisis analógico entre el uso que se le dio a los descubrimientos de la biología referidos al evolucionismo y la corriente hiper-pragmática y consumista que adquiere la informática en ciertas instituciones escolares.
La informática educativa y los contenidos escolares
Un famoso artista estaba dando sus toques finales a un cuadro de época, en el que había gentes y objetos comunes. Entre los que observaban el cuadro, había un zapatero, quien, mirando atentamente el calzado de uno de los personajes pintados, hizo una tímida observación al artista : "Esos zapatos no eran así, sino de tal y cual forma". El pintor le agradeció el gesto y procuró corregir el detalle. A continuación, el zapatero tomó coraje y se permitió señalarle algo en la cara de un personaje. "Ah, no"- interrumpió el artista- "Zapatero, a tus zapatos".
Me gustaría saber a cuántos de Ustedes les ha sucedido algo similar, trabajando con alumnos de primaria con informática. Tanto si son ustedes los docentes del grado como los encargados de las clases de informática, no faltan las oportunidades para sentirse el pintor o el zapatero del caso...Parece que tanto unos como otros tienen espacios de intervención que no deben superponerse.
Si hablamos del nivel medio el abismo es aún mayor : las clases de computación, dentro o fuera del horario escolar, son actividades aisladas del resto, que sufren igual fragmentación que las demás asignaturas escolares.
Que la informática ha llegado a las escuelas ya no es tema de discusión. Podrá serlo el modo en que ésta se incorpora a la praxis institucional, las políticas educativas en tal sentido, etcétera. Pero ya es un hecho innegable que se espera que las computadoras formen parte del medio ambiente escolar.
Lo que no está claramente definido, y es motivo de más de un conflicto, es la "categoría" de los aprendizajes que se realizan con las computadoras, y si aquello que se aprende con ellas debe considerarse dentro del currículum escolar o no. Es obvio que se trata de un contenido escolar cuando los alumnos están viendo el sistema solar en sus pantallas, o cuando redactan una nota para el periódico de la escuela. Pero cuando se explican a veces unos a otros- los pasos para abrir un archivo, cuando deben anotar en sus cuadernos el nombre del directorio de trabajo, para recordarlo la clase próxima, cuando incorporan rutinas de depuración de errores basadas en métodos propios del trabajo con computadoras, cuando preguntan "cuáles son las teclas de copiar acá" o simplemente cuando imprimen un trabajo...estamos en presencia de nuevos contenidos. De la clase que deseen : conceptos, hechos, principios, habilidades, procesos, estrategias, normas...
Podríamos argumentar que estos saberes se gestan por añadidura, como consecuencia de la inclusión de un recurso nuevo. Correcto, pero sucede que sin ellos el progreso en el uso de la informática se ralentiza de manera drástica. Son cosas que se deben enseñar.
La pregunta es a quién le corresponde esa tarea.
La función del enseñante
Por cientos de años, la figura del maestro fue la de un dador de sabiduría, un ejemplo a seguir. El maestro me gusta tanto más esta palabra que "docente" no sé por qué- cumplía la función de guiar al alumno, al discípulo, al inmaduro, hacia un estado de mayor comprensión. El maestro , como depositario del saber de una comunidad, actuaba como un transmisor. Buscaba los mejores métodos para ello, trataba de conservar con la mayor fidelidad posible los conocimientos considerados importantes para la sociedad de su tiempo, poseía las respuestas a las preguntas de los "aprendices".
En nuestro país la imagen del maestro ha sufrido ciertas mutaciones, adoptando en distintas circunstancias, roles y perfiles diferentes. Hubo un tiempo para el maestro como apóstol, uno para el maestro como técnico de la enseñanza, otro para el maestro como trabajador de la educación. La función y las exigencias de la actualidad han hecho surgir la necesidad de hablar de la profesionalización de la tarea. Todas estas categorías, usadas aquí a modo ilustrativo, entroncan con corrientes filosóficas, políticas y culturales, y nadie podría arrogarse el derecho de definir una como válida. Además, los que estamos en educación sabemos de sobra que bien podemos ejercer nuestra función a veces como técnicos, a veces como trabajadores, a veces también como apóstoles ...
Si enfocamos la cuestión de la informática educativa en los últimos años, podemos observar un rápido cambio de frentes, un síntoma que, a primera vista, califico como saludable . En un principio, sólo los que tuvieran conocimientos técnicos específicos de computación (analistas de sistemas, estudiantes de ingeniería, o a veces, simplemente personas capacitadas en cursos "de computación") podían aspirar a dictar clases, a enseñar. Como si para enseñar algo sólo bastara saber sobre el tópico...
Recién en los últimos años, con la masividad de la llegada de las PCs a los hogares, los talleres de informática, los laboratorios de computación o como quiera que se llame al espacio en las escuelas, empiezan a ser considerados como "parte" de la escuela, y muchos docentes se acercan a la informática para "tomar su lugar".
Darwin, Spencer y la Informática Educativa
Charles Darwin, el famoso naturalista inglés que visitó nuestras costas allá por 1831, a bordo del "Beagle" dedicó buena parte de su vida a investigar y profundizar lo que había vivido durante los cinco años de ese viaje, y que publicó en 1859, tras años de depuración y fino análisis, bajo el título "El origen de las especies".
Esta publicación, largamente esperada por el mundo científico, transmutaba a la biología de un conjunto de datos y descripciones, a una ciencia sistemática, basada en una teoría de sólidos sustentos. La idea de la evolución, junto con los demás postulados estudiados por Darwin, influyeron prácticamente en todos los campos del saber humano, marcaron la cultura, la religiosidad, la historia, la filosofía, el arte... El libro citado sigue siendo un éxito de ventas aún hoy.
Y, al igual que mucho mas tarde lo haría el psicoanálisis , y actualmente, la informática, los términos y los postulados del darwinismo fueron impregnando gradualmente, no sin pocos esfuerzos, al lenguaje cotidiano y la comprensión de ciertos fenómenos.
Herbert Spencer, un entusiasta de la teoría de Darwin, la asimiló con beneplácito a sus propias reflexiones acerca de la cultura y la sociedad, que fueron, por otra parte, el germen de la ciencia de la sociología.
Fue él quien popularizó el término "evolución" y la expresión "supervivencia de los más aptos", que, como nadie ignora, se aplican hoy a temas tan diversos como los juegos olímpicos o la disputa Explorer-Netscape.
Spencer llegó a postular los beneficios de una selección deliberada (no largamente mediata, como la natural ) regulada por los "más aptos", para colaborar acelerando el proceso evolutivo de la especie humana. En 1883 denominó "eugenesia" al estudio de los métodos para obtener este mejoramiento humano.
Teoría y práctica en Informática Educativa
Existe la teoría en el campo de la Informática educativa ? Y aún más : Existe algo llamado "Informática Educativa"? Hay muchas posturas al respecto, pero es un tema que excede este artículo.
Lo concreto es que existe un cuerpo de conocimientos relacionados directa o indirectamente con las computadoras, que son considerados hoy en día como parte de la currícula escolar. Con grandes divergencias en la práctica, existe sin embargo consenso en considerar "útil" el uso de la informática como recurso educativo.
Podríamos decir que el área se encuentra en un estado de crecimiento, de cambios, de transmutación. Está volviéndose un punto de sumo interés para los profesores, para los técnicos, para los diseñadores de software, para los teóricos de las ciencias de la educación.
Todavía no hay un "PC - Darwin" que nos dé la pauta de que la informática educativa tiene fundamentos sólidos y ha superado la etapa descriptiva y puramente empírica. ( Por otra parte, sería ilógico esperar que un campo del conocimiento evolucione igual que otro con objetos y propósitos tan disímiles. Sólo lo estoy tomando como referente.)
Pero sí hay una cantidad de personas relacionadas con la informática y la educación y no de forma casual o azarosa- que han dedicado gran parte de sus esfuerzos en sentar las bases teóricas para esta zona nueva del enseñar y aprender. Personas que han comprendido que existe un sujeto que aprende, una didáctica a construir, un objeto de estudio especial, un impacto sobre los modos de apropiación de los saberes generado por este recurso impredecible y mutante... Personas que han intentado acercarse a la informática con instrumentos de análisis, para aportar a la educación no sólo un vistoso recurso "moderno" sino, fundamentalmente, nuevos métodos y estilos de aprender, nuevos conocimientos, mejores usos de las herramientas nuevas.
Pienso que muchas de estas personas en todo el mundo generarán, mas tarde o mas temprano, el efecto que Darwin generó en la biología, el paso de ser una recopilación copiosa de datos y experiencias, a ser un cuerpo de ideas unidas y sustentadas en buenas bases, de ser un simple instrumento a ser un entorno de aprendizaje plenamente aprovechado para lograr mejores efectos que los anteriores.
El panorama es muy complejo, porque la realidad educativa así lo es. No podemos aseverar "Esto es lo que debe enseñarse en la escuelas" por ejemplo, a riesgo de :
- Excluir saberes valiosos por desconocimiento
- Quedar desfasados en lapsos muy breves, visto la velocidad del cambio
- Ignorar los ambientes reales en los que se aplicarán estos postulados
- Simplificar, degradando la calidad de la enseñanza
Pese a todo lo antedicho, mi postura es que quienes están teniendo actualmente el perfil más adecuado para proponer recortes didácticos del uso de las computadoras en las escuelas son los docentes especializados en informática.
No los especialistas en informática, aunque sean ingenieros en sistemas y sepan muchísimo, y algunos hasta sean mejores profesores que algunos profesores.
Tampoco los docentes que hicieron "un cursito en una academia" , que me parece loable, ya que, en un alto muy alto- porcentaje de los casos, lo pagan de su bolsillo para no quedar desactualizados ante sus alumnos.
Sé que me ganaré las antipatías de unos cuantos, pero mi criterio me dice que quien mejor puede aprovechar un recurso para una función educativa es quien conoce muy bien las potencias de dicho recurso, las "habilidades", lo que "se puede hacer", y que además conoce muy bien los recovecos de la función de enseñar, los niveles evolutivos, la dinámica de las instituciones, lo urgente y lo importante en el contexto escolar.
Por cierto, la inclusión de las computadoras en ambientes escolares despierta en no pocas personas una suerte de optimismo pedagógico que desearía para sus campañas más de un candidato a ministro de educación.
Seducidos por las apariencias las mas de las veces, no dudan en afirmar que las computadoras, por el sólo hecho de estar allí, beneficiarán a los alumnos, los harán más capaces, más habilidosos, más informados. El optimismo, pues, está puesto no en los sujetos quienes, aún mediados por el entorno humano y los materiales, están a cargo de sus propios aprendizajes- sino en los objetos.
Permítanme citar una frase de Jean Piaget, aplicada con ironía a la confianza del conductismo en el estímulo : "Cuando un conejo se come un repollo, no se transforma en repollo; es el repollo quien se transforma en conejo"
Piensen esta frase, cambien repollo por enciclopedia multimedia, por ejemplo, y conejo por alumno...
No estoy diciendo que haya oscuras intenciones en quienes magnifican acerca de los beneficios de las computadoras. En verdad, a mí recuerdan mucho a Spencer, en su lectura de la teoría de Darwin. Encuentran un espejo de sus propias reacciones frente a un universo nuevo y fascinante, encuentran que hay una explicación que encaja de maravillas con sus propias concepciones acerca de determinados fenómenos.
Spencer tomó la teoría de la evolución natural de las especies y la llevó, sin más trámite, al campo de las relaciones sociales en grupos humanos. La teoría proveniente de la biología le venía de perlas, se ajustaba a algunos de sus supuestos y le sirvió para generar ciertas ideas que causaron cierto impacto y no poca adhesión aún cuando hoy en día se consideren superadas. Probablemente él imaginó la eugenesia como una cosa distinta de la que terminó siendo. "Los más ruidosos eugenistas no son científicos" se quejará luego Isaac Asimov, pero usan las palabras de la ciencia, se apropian de un espacio y de un lenguaje para "batir sus propios tambores".
Trabajo en el área de Informática Educativa hace algunos años, y como muchos otros en mis condiciones, me he formado ciertas ideas respecto de qué enseñar y cómo.
Aunque éstas cambien, inevitablemente, año a año, siempre persiste un marco conceptual desde el cual uno mira el mundo y hace su tarea.
Más de una vez me siento acosada por discursos de lo más diversos que me dicen qué hacer en informática educativa. Discursos comerciales, institucionales, paternales, técnicos. Todos saben algo, de acuerdo. Hay que escuchar a todos los involucrados, que parecen ser muchos en esta parte del currículum escolar. Pero es necesario tener afinado el oído. Distinguir las batidas de los tambores...
"No sé lo que quiero, pero lo quiero ya!"
Los más jóvenes tal vez reconozcan la frase del subtítulo, es parte de una canción. Además de ello, es una interesante síntesis de las demandas de nuestros alumnos (y, a veces, de sus papás....) respecto de la escuela.
No voy a descubrir la pólvora por afirmar que se está consolidando en torno de las computadoras en las escuelas un discurso ( y, peor aún, una acción ) que se centra en las utilidades propias de equipos y programas, en las soluciones pre-hechas, en las velocidades de resolución, en los resultados rápidos y fáciles.
Ya no importa tanto qué hizo el alumno con la computadora sino qué es capaz de hacer la computadora (o el soft ). Luego, sólo será cuestión de ir buscando en el menú las opciones adecuadas, o encontrar los iconos, que es mejor, así no hay tanto que leer...
En realidad, mi opinión es que la tendencia a priorizar un resultado rápido y prolijo por sobre un proceso laborioso y más lento, se relaciona apropiadamente con el modo en que debemos llevar nuestra vida los adultos en estos tiempos. No está mal que de un software que adquirí para escribir mis textos, por caso, yo espere ciertas utilidades, ventajas que me permitan ahorrar tiempo, figuras para decorar mis producciones, herramientas que faciliten la tarea para lo cual lo adquirí. La pregunta sería : la escuela debe imitar al mundo de los adultos en este sentido ? Los alumnos deben usar las computadoras para "ganar tiempo"? Las aplicaciones desarrolladas actualmente cubren un espectro de opciones cada vez más amplio. Podemos afirmar, casi, que existe un software para cada necesidad. Y eso en sí mismo no es bueno ni malo. Los programas que "pueden hacer " determinadas cosas son solo un aspecto del empleo de las computadoras en el entorno educativo.
No entiendo la necesidad de que todo lo que se haga usando informática deba acelerar los tiempos, o deba producir un bello efecto visual en la pantalla o en la hoja impresa. Observo como las "bondades" de las computadoras son malinterpretadas muchas veces por los responsables de la educación con propuestas que desvalorizan incluso estas mismas ventajas. ¿ Para qué animar a los alumnos a construir conceptos matemáticos si ya existe el programa "X" que dibuja solito las funciones dándole los valores? Para qué explorar la combinación de colores y formas, si tenemos un clipart lleno de bichitos para todos los gustos? Para qué insistir en la organización del material escrito si se puede copiar el texto íntegro de la enciclopedia y pegarlo en la hoja del procesador de texto, con mi firma abajo ? ¡Aceleremos el cambio ! Spencer estaría muy a gusto con estas propuestas...
Entiéndase bien que en modo alguno afirmo que se debe negar el uso de materiales computacionales que solucionen ciertos escollos, lo que no me parece pertinente es reemplazar con éstos a todos los procesos de interacción propios del aprender que son necesarios atravesar . Y que requieren un esfuerzo intelectual, una reacomodación que permita establecer conexiones nuevas, usos inteligentes.
Un docente especializado en informática educativa es quien puede ver tal vez con mayor claridad este punto. Como docente, entenderá que existen niveles evolutivos y etapas de desarrollo del intelecto que posibilitan o invalidan ciertas propuestas ( como aquella de enseñar planilla de cálculo a niños de seis años...). Como conocedor de los recursos del área de informática, estará capacitado para seleccionar los más aptos, para renovar con criterio el material de uso (los maestros, en general, tienden a ser conservadores, aunque digan lo contrario) sin quedarse apegado a viejos esquemas. Como un doble experto, tendrá, como dice una canción "ojo en camino y ojo en lo por venir", y podrá orientar a quienes trabajen a su lado, podrá esclarecer a los padres que en muchas oportunidades valoran mas los materiales con los que sus hijos trabajan que los contenidos que pueden abordar mediante ellos.
Los que trabajamos en talleres de informática educativa, en proyectos pedagógicos que implican un uso intensivo de la informática, sabemos que enseñar a manejar un software de aplicación actualmente no es tarea difícil. No se requiere demasiado costo intelectual para transmitir los datos del manejo.
En cambio, elegir buenas estrategias didácticas para transmitirlos, integrar a las computadoras eficientemente a las acciones educativas -no como un mero adorno- diseñar actividades que impliquen un aprovechamiento óptimo del recurso, hacer que un proyecto de informática crezca y no caiga en el fracaso...para esto se necesita otro perfil profesional, que no se adquiere sólo con información técnica, ni sólo con buena voluntad de "sentarse frente a la máquina".
El conocimiento que poseen estas personas, sin títulos oficiales a veces, es absolutamente necesario para iniciar -o para seguir- un diálogo que apunte a construir una didáctica de la informática. Tengamos en cuenta que estamos hablando de una disciplina no sólo nueva, sino en constante y veloz transformación. Un docente especializado en este campo asume que su tarea es sintetizar dos prácticas con una alta dosis de creatividad. He aquí un aspecto a cultivar por la educación de nuestro tiempo: ya no podemos seguir educando para permanecer, debemos preparar a los jóvenes para pensar de nuevas maneras, para imaginar.
Todos los actores de las propuestas educativas pueden sumar su aporte en este ítem. Cada cual desde su punto de vista, todos pueden contribuir a enriquecer los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Análisis de situaciones, de materiales, de usos, de conceptos...Síntesis nuevas y reflexivas. Nuevos análisis. Práctica y teoría como dos momentos necesarios y mutuamente involucrados en el crecimiento.
Un camino más lento, sin duda. Más "evolutivo" .
Un espacio que nos convoca para hacer, pues mucho es lo que falta.
"Zapatero...a tus zapatos !"
Al respecto es interesante la investigación de Sherry Turkle "El segundo yo. Las computadoras y el espíritu humano". Aunque con varios años de antigüedad contiene una observación detallada del modo en que la "cultura computacional" se agrega a la vida cotidiana, se trasluce en el lenguaje, etc. La autora sostiene que el discurso del psicoanálisis hizo otro tanto, en su momento, y que ahora ya está totalmente incorporado a la vida cotidiana.
